El edificio Santa Lucía, ubicado en pleno corazón de Sevilla, presentaba un reto técnico y estético en su iluminación exterior ornamental. El sistema anterior, basado en lineales instalados en ventanas, sufría un deterioro constante por el paso de peatones y usuarios, afectando tanto a la durabilidad como al impacto visual nocturno del edificio. Se nos planteó la necesidad de ofrecer una solución arquitectónica eficiente, duradera y con una estética cuidada, que respetara la arquitectura original del edificio y eliminara los puntos de conflicto en zonas transitadas.